martes, 4 de enero de 2011

Sed

Te deseo y lo sabes, o al menos deberías. Te deseo y deberías saberlo, pero lo más dudoso es si sabes o no el punto hasta el que te deseo. Te deseo de tal forma que quiero tomar todo lo que pueda de tí, hasta el punto de querer ser yo la que  tome el último sorbo de tu vida. Espero que sepas cómo quiero tomarlo, me conoces, conoces eso en concreto, deberías saberlo. Sí, tomaré la última gota roja de tu vida cuando ya sepa que esta se extinguiría igualmente y me iré con mi eternidad a nacer de nuevo, pero con buenos recuerdos de quien fuiste y hablando como si yo no fuese la que te ha matado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario